(1) VICKY EL VIKINGO, de Michael Bully Herbig.

MÁS VALE MAÑA QUE FUERZA
Tras contemplar cómo recientes adaptaciones al cine de conocidas series de TV ningunean la fuente original, resulta satisfactorio comprobar que, en ocasiones, los responsables de adaptarlas no sólo respetan las señas de identidad, la estética y el espíritu de las mismas, sino que además demuestran tener conocimientos sobre su referente.
Correcta adaptación de la popular serie de animación de los años 70, basada a su vez en los libros infantiles del autor sueco Runer Johnson (1916-2006), Vicky el vikingo narra las andanzas del joven vikingo en un viaje lleno de aventuras, con fantasmas y legendarios tesoros, que introduce al público, aunque superficialmente, en el mundo y la cultura escandinava, y destaca, al igual que en la serie televisiva, la importancia que tiene utilizar la inteligencia antes que la fuerza bruta en cualquier situación. No hay que olvidar que una de las características principales del protagonista, el pequeñajo Vicky, es que compensa su escaso poderío físico con una inteligencia superior al resto de sus compañeros de aventuras.
En definitiva, Vicky el vikingo es una de esas producciones infantiles que, sin dejar de ser un mero pasatiempo, por su esmero en respetar el origen y las peculiaridades del personaje se deja ver por los niños y sus acompañantes adultos sin esa incómoda sensación de haber perdido tiempo y dinero.
Leave a reply
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.