(1) MR. MAGORIUM Y SU TIENDA MÁGICA, de Zach Helm.

CUENTO PRENAVIDEÑO
El guionista Zach Helm, autor de la entretenida comedia metalingüística Más extraño que la ficción (2006), da el salto a la dirección con una discreta comedia infantil que, con un gran sentido de la oportunidad, se estrena días antes del inicio de las fiestas navideñas.
Mr. Magorium y su tienda mágica recoge la mejor tradición del cine sensiblero y colorista de Disney, con Mary Poppins (1964) como máximo exponente, a partir de una ñoña historia de amistad y superación personal, pero actualizando contexto, situaciones y personajes desde una perspectiva actual.
Es muy estimulante, para niños y no tan niños, contemplar las manifestaciones mágicas de la tienda de juguetes, pero el argumento –una joven dependienta, en medio de una crisis de confianza y autoestima, debe hacerse cargo de una juguetería con vida propia cuando su excéntrico dueño decide retirarse– carece de complejidad e interés.
Como viene siendo habitual en este tipo de producciones, los personajes evolucionan a golpe de buenos sentimientos, la historia está llena de moralejas por todos conocidas, el protagonista más joven se comporta con una madurez inusitada y poco creíble y el universo conspira para alcanzar un gratificante final feliz. Previsible y edulcorada, Mr. Magorium y su tienda mágica abre oficialmente, junto a Fred Claus, el hermano pequeño de Santa Claus (2007), la campaña de films destinados al público infantil de temática navideña.
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