(1) THE FIGHTING TEMPTATIONS, de Jonathan Lynn.

DISCRETO MUSICAL AFROAMERICANO
Superficial comedia musical afroamericana protagonizada por el actor Cuba Gooding Jr. que narra el regreso de un joven con problemas económicos a su Georgia natal para hacerse cargo de la herencia de una tía lejana, pero para ello deberá formar un coro de gospel y hacerlo triunfar en un concurso. Nos encontramos de nuevo con la típica superación de las dificultades y el logro del éxito a partir de la nada, tan propio de las producciones comerciales de la industria estadounidense, con enamoramiento incluido, la existencia de unos personajes estereotipados sin evolución alguna, y lógicamente —para asegurar los ingresos en taquilla— una conclusión perfectamente satisfactoria para los espectadores.
Lo único valioso del film es la interesante banda sonora que plantea una fusión de gospel, rhythm and blues, hip hop y soul, formada por la intervención de las voces más prestigiosas de la música negra como la cantante de Destiny’s Child, Beyoncé Knowles —coprotagonista de la película—, la reverenda Shirley Caesar, Faith Evans, Angie Stone, Melba Moore, Montel Jordan, T-Bone y Zane. Además se incluyen actuaciones especiales de artistas como la ganadora de un Grammy Yolanda Adams y The Blind Boys of Alabama.
The fighting temptations resulta una película entretenida, por tanto cumple la función para la que fue producida, y es recomendable para los amantes de la música negra. No obstante, conviene olvidarse de la historia y de los personajes que aparecen en ella.
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