(1) ESTAFADORES, de Gregory Mosher.

ENTRE PILLOS ANDA EL JUEGO
Estafadores es una discreta película que explora las relaciones profesionales y personales de tres amantes de lo ajeno, estafadores de distinta categoría, que se unen, junto con más gente, para la consecución de un timo a gran escala. La historia, la realización de un timo telefónico, resulta de lo más simple por lo que el realizador desarrolla varias líneas argumentales como la amistad entre el protagonista y su compañero de piso, la relación pasional entre el protagonista y la estafadora interpretada por Julia Ormond, todo ello para dotar de contenido una película poco consistente y proporcionar tridimensionalidad a unos personajes que son más planos que el papel de fumar. En ese sentido, los personajes interpretados por Ed Harris y Julia Ormond no dan para mucho pese a la calidad de ambos actores, se trata de personajes sin definición, basados en arquetipos como el jefe dominador y la seductora o devoradora de hombres. No pasa lo mismo con el personaje interpretado por Vince Vaughn, un estafador que se mueve en la ambigüedad moral, entre el bien y el mal, personaje con sueños y dudas, consciente de sus limitaciones y que, finalmente, caerá en una sorprendente ingenuidad impropia de su profesión. Estafadores cumple, por tanto, mínimamente su función: entretiene, que no es poco.
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