(1) EN LA CAMA CON MADONNA, de Alek Keshishian.

UNA FAMOSA CANTANTE POP
Un reportaje sobre la gira mundial que realizó Madonna recientemente, mostrando tanto sus actuaciones sobre los escenarios (color) como sus actividades y manifestaciones en hoteles y camerinos (b/n). Madonna es un prodigioso producto de marketing y En la cama con Madonna revela su condición sin rubor ni disimulo.
El único interés del film reside en su cualidad de documento revelador sobre los mecanismos psicosociales sublimadores del público, capaz de convertir en divina estrella musical a una chica completamente vulgar, ya que sus irreverentes y zafias alusiones a cuestiones sexuales y religiosas funcionan muy gratuitamente como objeto de escándalo de un sector puritano que nunca llegará a interesarse por sus actuaciones. Otra cosa, para entendernos, eran las inteligentes y sutiles provocaciones de una Mae West.
A la película le sobra la mitad de su metraje, por exceso de chorradas que a nadie interesan. También deberían haberse cuidado más sus shows, muy pobremente retratados por culpa de un montaje entrecortado, empobrecedor, que sigue la moda neurotizante de la mayoría de videoclip, que ganan en ritmo a costa de destrozar la coreografía.
Madonna, a la que se quiere presentar como modelo de liberación personal ante una cierta juventud actual, sólo aparece aquí como ejemplo de horterilla maleducada. Y un aviso para espectadores incautos: lo de la “cama” del título se refiere a los juguetitos y bromas que la cantante lleva a cabo sobre un lecho con los bailarines de su espectáculo, unos mozos ciertamente nada peligrosos para su propia virtud.
Leave a reply
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.